Llegan a nuestras consultas, muchos padres preocupados por el tema de la violencia instalada en la sociedad, y ante los interrogantes que nos plantean, nos hace pensar, desde que ángulo podemos tratar ese tema.
¿Desde qué espacio? ¿Individual, grupal, comunitario, institucional?
Pensamos que existen modelos comunicacionales y de conductas que favorecen las acciones violentas a nivel emocional y físico, desencadenando en los ámbitos familiares, económicos y políticos, diversos conflictos que amenazan las buenas y correctas relaciones.
Si tocamos el tema de la violencia hacia los niños y adolescentes, totalmente frecuente en nuestra sociedad, nos remontamos a la época del iluminismo, y podemos preguntarnos: ¿qué pasó desde entonces y hasta el presente, con el concepto del ¨niño rey ¨y del respeto por el otro?…
El fenómeno de la violencia fue penetrando las relaciones abiertamente y sin pausa, sin controles, y plena de desbordes en sus diferentes matices con una increíble aceptación social.
Como pensar una sociedad sin violencia en sus interacciones, cuando ésta, se ha naturalizado. Desde los medios, y las distintas instituciones que la generan existe una evidente imposibilidad de ponerle freno.
Si bien estamos lejos de alcanzar la meta de “aprender a tratarnos bien” – esta premisa aparece como un ideal a buscar y poder cumplir.
El modelo de “buenos tratos” ya tiene un número significativo de adherentes quienes realizan importantes esfuerzos por instalarlo, modelo que pertenece a todos los que aspiran a la conformación de un hombre íntegro y digno de respeto, trabajando diariamente en pos de ese objetivo, desde la toma de conciencia en general, y desde las distintas profesiones e instituciones.
Sin embargo, la violencia subsiste y creemos que se sustenta desde una ideología patriarcal, que no parece perder su supremacía.
Entonces conviven en la sociedad actual dos formas de relacionarse: Violencia versus buenos tratos, cuyos parámetros son diametralmente opuestos: el primero caracterizado por represión, autoritarismo, individualismo y materialismo que ubica su eje central en el poder, el sexo, el dinero, y la cultura física como parámetros de ÉXITO.
El segundo por una búsqueda de caminos para mejorar la convivencia humana, un modelo de NO VIOLENCIA, que lo sustentan valores en un equilibrio difícil de lograr, al interior de una cultura de la “imagen” y del “inmediatismo”, donde prevalecen los “antivalores” de la indiferencia, de la corrupción , ausencia de límites, y exceso de tolerancia hacia la anomia social.
Los años de trabajo con el tema de los “malos tratos”, han llevado con frecuencia a callejones sin salida, debido a la complejidad de la temática y a las instancias intervinientes. En el presente estamos en un alto grado de visualización de este fenómeno, pero no se ha logrado ponerle freno y mucho menos rodearlo, para que finalice su intensa y múltiple reproducción.
Como ya he señalado, la ideología que lo sostiene es muy poderosa y posee una fuerte capacidad de infiltrarse, como el agua en los cimientos de un edificio en construcción.
Los sesgos de los buenos tratos apenas se dibujan tímidamente en el intrincado mundo de las interacciones.
Los mensajes o meta mensajes que se difunden tienden a favorecer el desarrollo de la violencia- novelas, publicidad, carteles, etc.-
Es por ello que debemos trabajar en la difusión de los medios no violentos pero eficientes para resolver los conflictos. El paradigma de los “buenos tratos “abre nuevas esperanzas para aminorar y erradicar los efectos de la violencia.
EL PARADIGMA DE LOS BUENOS TRATOS CONSISTE EN UNA SOCIEDAD EN LA QUE ABUNDAN LOS VALORES: Alegría – Creatividad - Amistad – Crecimiento – Generosidad – Amor – Gentileza – Productividad – Apoyo – Cultivo – Gratitud – Progreso – Aprendizaje – Cumplimiento – Honestidad – Realización – Armonía – Desapego - Humildad – Respeto – Autenticidad – Humor – Romance- aventura – Disciplina – Igualdad – Sabiduría – Belleza – Educación – Independencia – Seguridad – Bienestar – Empatía – Integridad – Sencillez – Bondad – Entrega – Justicia – Serenidad – Claridad – Entusiasmo – Lealtad – Servicio – Colaboración – Equilibrio – Libertad – Sinceridad – Compañerismo – Espiritualidad – Limpieza – Solidaridad – Comprensión – Estabilidad – Madurez – Suavidad – Comunicación – Estética – Naturaleza – Ternura- Comunidad – Nobleza – Tolerancia – Conexión – Éxito – Paciencia – Tradición – Confianza -familia – Participación – Tranquilidad – Constancia- Fidelidad- Pasión- Valentía- Contribución- Flexibilidad- Paz- Variedad- Cooperación- Franqueza- Paz interior- Vitalidad
¿Cuáles prácticas? ¿Cuáles pondrás en marcha a partir de HOY?
Lic. Beatriz Cruces- MP 273
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